La conectividad y el vehículo autónomo en España aportarían más de 100.000 millones de euros al Producto Interior Bruto (PIB), un 7,5% del mismo, según el consejero director general de Nissan Iberia, Bruno Mattucci, que ha citado un estudio del Parlamento Europeo durante la IX Edición del Foro Nissan.
En el evento se ha discutido el papel de la conectividad, el vehículo autónomo o la inteligencia artificial (IA) en la industria del motor, y se ha puesto de manifiesto que el automóvil sigue siendo un sector multiplicador de la economía española y que es importante seguir acelerando las medidas para potenciar este sector. «La electrificación es la única puerta de entrada hacia el resto de las tendencias que vendrán, como la movilidad autónoma, la conectividad o la inteligencia artificial», ha añadido Mattucci.
El directivo ha indicado también que la IA y la conectividad de los vehículos pueden hacer la vida más fácil, más segura, más conectada y «más emocionante». Sobre todo, ha dicho, la inteligencia artificial tiene ventajas como el análisis de datos para eliminar el error humano y el riesgo en la conducción, así como la disponibilidad 24/7 y la reducción de accidentalidad, con el objetivo de tener cero accidentes.
De su lado, el director de la división de Marketing y Ventas de Nissan, Jordi Vila, ha destacado los avances en materia de seguridad de la compañía como la tecnología ‘Lidar’ de control de maniobra, que está basada en tecnología de sensores para la percepción de la realidad y que podrá prevenir colisiones.
También ha querido señalar proyectos como ‘Brain to Vehicle’, en el que Nissan está inmersa en la investigación que permitirá a los vehículos interpretar las señales del cerebro del conductor, redefiniendo la forma en que las personas interactúan con sus coches, al anticiparse a los movimientos previstos en determinadas situaciones. Y que estos sistemas pueden realizar acciones, como girar el volante o frenar el coche, entre 0,2 y 0,5 segundos más rápido que el conductor.
Finalmente, ha mencionado también el proyecto de ‘Invisible to Visible’, que ayudará a los conductores a través de la combinación de la información de los sensores situados en el vehículo y con los datos de tráfico alojados en la nube, permitiendo al sistema distinguir el entorno inmediato del vehículo y anticiparse a aquello que el ojo humano no puede ver, mostrando incluso lo que hay detrás de un edificio o a la vuelta de la esquina.
«La electrificación y la movilidad autónoma unida a la inteligencia artificial podría hacer que zonas rurales desconectadas de España se puedan conectar a través de los vehículos para favorecer aspectos como la atención médica o farmacéutica, de manera que la población de esos lugares aproveche las oportunidades de la tecnología, es decir, nuevamente, innovar y usar la tecnología para enriquecer la vida de los ciudadanos», ha añadido Vila.