Esta misma mañana José López-Tafall, director general de ANFAC, y Marta Blázquez, vicepresidenta ejecutiva de FACONAUTO, presentaron en formato online una metodología y un mapa de desarrollo de infraestructuras de recarga para vehículos eléctricos en España, que prevén desarrollar en distintas fases.
Con una red de 245 puntos por cada millón de habitantes, España se sitúa hoy muy por debajo de la media europea. Para hacer frente a los objetivos de descarbonización hay que incrementar el número de vehículos eléctricos, que ve frenada su expansión por esa falta de red de recarga a nivel nacional, según indican los responsables de las asociaciones de fabricantes de vehículos. En sus palabras, el mercado dispone de una amplia variedad y oferta de vehículos eléctricos a disposición de los conductores, pero le falta red de recarga y potencia.
Los fabricantes proponen una metodología que fomente esa red de recarga que en la actualidad se compone de 11.517 puntos en toda España, y dónde Cataluña resulta la comunidad con más opciones para tener vehículos eléctricos al disponer de 3282 puntos, seguida por Madrid con 1.408.
También queda patente que la potencia generada en la actualidad sería insuficiente para atender el aumento estimado de vehículos eléctricos.
Según los objetivos de los fabricantes, expresados en este seminario online, España debería tener en el año 2023 un total de 70.000 puntos de recarga, 110.000 en 2025 y 340.000 en 2030 para abastecer el parque de 5 millones de vehículos electrificados planteados por el Gobierno en el PNIEC.
“El sector de la automoción se enfrenta a una transición hacia una movilidad sostenible con objetivos cada vez más exigentes en materia de reducción de emisiones para las próximas décadas. Alcanzar estos objetivos necesita de herramientas y medidas a la altura que ayuden a impulsar el cambio. Por ello, es necesario aumentar el esfuerzo y establecer objetivos vinculantes en el desarrollo de infraestructuras que permita establecer una red de puntos de recarga en España con capacidad y potencia suficientes, que convierta a la electromovilidad en una mejor opción de compra para los usuarios y, del mismo modo, avanzar hacia una movilidad sostenible y en línea con los exigentes objetivos de descarbonización”, afirman desde ANFAC.